miércoles, 4 de mayo de 2011

Vestigios iberos en Huelma


En Huelma se encontró una de las esculturas que más fama han alcanzado en los últimos tiempos, la extraordinaria cabeza de lobo, cuya imagen ha recorrido Europa como cartel de la exposición Los iberos. Príncipes de Occidente. La cabeza de lobo forma parte de uno de los centros más importantes de la cultura ibérica, el Santuario Heroico del Cerro del Pajarillo (siglo IV a.C). Este santuario era la puerta de entrada de un territorio controlado por un aristócrata ibero en el valle del río Jandulilla, y cuya sede central debería ubicarse en el gran asentamiento de Úbeda la Vieja. El Santuario estaba presidido por una torre central con un grupo de esculturas que representan una escena de tipo heroico, en la que un individuo (un héroe) se enfrenta a un lobo que parece haber raptado a otro individuo que se encuentra desnudo e inerte. A la torre se accedía por un complejo sistema de escaleras. El monumento se completaba con las figuras de dos grifos y dos leones echados. Delante aparece una superficie cuidada donde se realizaron actividades de tipo ritual, mediante ofrendas (tras su excavación el yacimiento fue enterrado, sus esculturas se conservan en el Museo Provincial).

Casas y monumentos de Saragüeta



El pueblo se compone de unas pocas casas de estilo típico del pirineo y dispuestas en torno a la plaza y a una fuente de dos caños, cuya agua emana de los manantiales del lugar. Cabe destacar una casa de arte gótica con dos puertas de arcos de medio punto. Se dice que en tiempos, dicha casa era un convento. Hoy en día está dividida en dos viviendas. La Iglesia de San Juan Bautista es de estilo gótico, consta de una sola nave en forma de cruz. En su interior, el retablo mayor es más moderno y decorado con ocho tallas pintadas en estilo Renacimiento (siglo XVI).
El “puente esqueleto”(perteneciente al municipio de Urdiroz), es un puente medieval de gran valor histórico, cultural y artístico pese a su estado hoy en día derruido. Se encuentra a unos 500 metros de la casa denominada “la Borda” de Saragüeta sita en la carretera de Aoiz a Burguete y un kilómetro más o menos del centro urbano de Saragüeta. Por él, se dice que pasaban las caballerías, además de ser una ruta de gran importancia porque se encontraba en el camino que venía de Aezkoa y Burguete se adentraba en el Valle de Artze y seguía hacia el desaparecido Valle de Arriasgoiti y posteriormente al Valle de Egües, siendo utilizado no solo por muchos viajantes sino también por peregrinos que se dirigían a Santiago.

Monumentos de Villava

MONUMENTOS CIVILES

Escuela de Peritos Agrícolas



El edificio de la antigua Escuela de Peritos Agrícolas de Villava, fue construido por el arquitecto Jose Yárnoz Larrosa en 1912, por orden de la Diputación Foral de Navarra. Si bien en un principio fue destinado a ser la sede del Congreso Nacional de Viticultura, para conmemorar el VII Centenario de la batalla de las Navas de Tolosa, poco después, en 1914, se convirtió en "Escuela de Peritos Agrícolas". 
Al crearse la Universidad Pública de Navarra, los estudios de Ingeniería Agrícola pasaron a impartirse en sus instalaciones. Entonces la antigua escuela fue remodelada en su interior para albergar diversos institutos del Departamento de Agricultura y Ganadería del Gobierno de Navarra. 
En cuanto a los aspectos arquitectónicos, es un edificio de piedra formado por varios cuerpos. En su fachada destacan los escudos de vivos colores en cerámica. Entre ellos se encuentra el escudo actual de Navarra y otro de épocas anteriores.

Puente de Villava



Al norte, en jurisdicción de Arre, encontramos el Puente medieval de Atarrabia del que el actual es una moderna reconstrucción. Por él salvaban el río tres importantes caminos. Uno llevaba a Arre y remontando el curso del Ultzama comunicaba con Baztan; otro, bordeando la ladera norte del monte Miravalles, ascendía hasta la aldea de Burrin (despoblada ya en 1366) para dirigirse hacia Roncesvalles remontando el río Arga; el tercer camino comunicaba Villava con el molino situado en la margen izquierda del río y con la localidad de Huarte. Este último -cuyo trazado se ha remontado a época romana y al que se denomina camino de Martiket, en un documento de 1368- constituyó la única comunicación con la vecina villa hasta que a finales del medievo se construyera el puente de San Andrés.
Junto al puente y a ambos lados del río Ultzama se levantaban dos molinos.

MONUMENTOS RELIGIOSOS


Iglesia de San Andrés
Iniciada en estilo renacentista a mediados del siglo XVI, el moderno edificio católico actual, situado junto al Ayuntamiento, data de la segunda mitad del siglo XX y conserva de aquella primitiva construcción la "Capilla de la Soledad" de planta circular y realizada a finales del siglo XVIII.


Historia de Villava


Habitada anteriormente, es en 1184 cuando el rey Sancho VI el Sabio creó, junto a la aldea de Atarrabia, la villa de Villava ("Villa noua"), otorgando a sus habitantes el mismo fuero que disfrutaban los habitantes del burgo nuevo de San Nicolás de Pamplona.Teobaldo II, poco después de subir al trono en 1254 confirmó sus fueros.
Según algunos historiadores, Villava fue un barrio de la Iglesia de San Nicolás y después de la parroquia de San Cernin o San Saturnino, de la que dista media legua y tiene por armas las mismas que la última iglesia, de quien era dependiente. Desde el siglo XV (1462 Juan II le otorga asiento en las cortes) y hasta 1828 Villava será una de las buenas villas del reino.
En 1405 los villaveses cedieron el patronazgo de la Iglesia de San Andrés al rey Carlos III, quien lo traspasó al Monasterio de Roncesvalles.
Villava era un lugar de paso, el típico pueblo-calle y cruce de vías que conducen al norte de Navarra y Francia. Durante toda la Edad Media y hasta mitades del siglo XVII, la villa perteneció a la merindad de Sangüesa, pasando en la época señalada a pertenecer a la merindad de Pamplona o de las Montañas.
Tras las reformas municipales 1835-1845 quedó como ayuntamiento de régimen común.
Los Siglos XIV y XV fueron nefastos (de mortandad y pobreza) para la villa. La situación mejora en el siglo XVI, crece la población y la prosperidad económica se evidencia en la construcción de la iglesia parroquial, el Ayuntamiento y el molino principal. De los siglos XVII y XVIII se tiene escaso conocimiento.
A finales del siglo XVIII contaba con dos molinos harineros, un batán y una escuela de primeras letras.
En el siglo XIX la villa será escenario bélico y su población participará en las guerras que arrastrarán la Revolución Francesa y las guerras carlistas. A consecuencia el casco urbano quedará  derruido y se producirá la desamortización de las propiedades del Monasterio de Roncesvalles.
Superadas las diferentes guerras que tan desastrosas consecuencias dejaron en la  localidad, se inicia el período de industrialización con la construcción de la primera gran fábrica papelera en 1841, antecesora de la actual Papelera Española - ONENA. A esta seguirían otras empresas dedicadas a la construcción de carruajes, fabricación de licores, vinos aguardientes, harinas, maderas, cartón, más recientemente empresas mecánicas y plásticas y en los últimos años la creación de un polígono industrial.
A comienzos del siglo XX se mejoran las comunicaciones. Así, se construye el ferrocarril eléctrico Irati que viajaba de Pamplona a Sangüesa. De esta manera se va configurando un núcleo industrial que atrae, inicialmente, habitantes de otras zonas de Navarra, y posteriormente del resto del Estado, motivo por el cual la población de Villava se multiplica por diez en el espacio de un siglo.


Villava



Villava (Atarrabia en euskera y de forma cooficial ) es una villa y un municipio de la Comunidad Foral de Navarra, situado en la merindad y cuenca de Pamplona,  a 4 km al noreste de la capital de la Comunidad, formando parte de su área metropolitana. Su población en 2010 fue de 10.568 habitantes (INE) y su término municipal tiene una superficie de 1,06 km² siendo el de menor tamaño de Navarra, por lo que su densidad de población es muy alta.